sábado, 9 de febrero de 2013

Napoleón

Napoleón Bonaparte no fue un general y emperador cualquiera. Fue el mayor genio militar que ha habido, el  general más brillante. Demostró ser un hombre muy inteligente y astuto. Se enfrentó con éxito contra una Europa que odiaba a Francia por sus ideas revolucionarias de libertad. Combatió en siete ocasiones con coaliciones europeas que atacaban a Francia. En inferioridad numérica, consiguió derrotar y someter a toda Europa en diversas ocasiones. Eso sin contar su brillantísima conquista de Italia o sus dificultosa conquista de Egipto. La cosa empeoró cuando quiso conquistar Rusia. Cuando llegó a Moscú, se enfrentó contra enemigos inesperados: el hambre y el frío. Acabó entregándose y fué exiliado en la Isla de Elba, A 20 km de Italia.
Pero escapó de la isla y regresó a Francia. El rey, al oir que Napoleón se acercaba, mandó al 5º regimiento de línea a detenerlo. Al encontrarle, Napoleón se apeó del caballo, caminó sólo hasta la línea de fuego y gritó:
- ¡Soldados del Quinto, ustedes me reconocen! ¡Si algún hombre quiere disparar sobre su emperador, puede hacerlo ahora!
Tras un silencio, los soldados gritaron: ¡Viva el emperador!, y marcharon juntos a París.
Durante más de 3 meses volvió al poder, pero acabó abdicando tras la Batalla de Waterloo.
Acabó exiliado en la Isla de Santa Elena, en medio del atlántico sur. Más tarde sería enterrado en París con todos los honores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario